La economía estadounidense ralentizó en agosto la creación de empleo. El mercado laboral generó 156.000 puestos de trabajo netos no agrícolas, según el Informe de Empleo publicado este viernes. Esto es, una cifra por debajo de lo esperado por los expertos. Asimismo, el paro se incrementa una décima hasta el 4,4%.

 El consenso de analistas seguidos por FactSet anticipaba un registro de nuevos empleos de 180.000, con un total de 168.500 puestos de trabajo creados por el sector privado. Mientras que esperaban que la tasa de paro se mantuviera constante en el 4,3%. Es decir, también en este caso, el dato se desvía respecto a lo previsto al incrementarse en una décima. El número de personas desempleadas en agosto asciende a 7,1 millones, 150.000 más que en julio.

Por su parte, lo proyectado por los expertos en cuanto al salario por hora era de un incremento interanual del 2,6%. En este caso, también hay una leve decepción. La remuneración por hora de los trabajadores aumentó un 2,5% -65 centavos- respecto al mismo mes el año anterior, cuando crecieron con la misma intensidad en la comparativa anual. Mientras que sube en 3 centavos respecto a julio tras aumentar este mes sobre junio en 9 centavos.

Asimismo, el Departamento de Empleo estadounidense ha revisado a la baja las estimaciones de creación de nuevos empleos de los dos meses anteriores. De esta forma, reduce el cálculo desde 231.000 puestos de trabajo hasta 210.000 en junio y desde 209.000 hasta 189.000 en julio. Esto es, entre junio y junio se crearon 41.000 empleos menos de lo calculado en el Informe de Empleo de julio.

La respuesta del mercado ha sido inmediata, especialmente en el mercado de divisas. El euro/dólar ha pasado de cotizar prácticamente plano a hacerlo con subidas del medio punto porcentual para, rápidamente, borrar gran estas subidas hasta moverse en niveles de 1,191 dólares. Por su parte, los futuros de los principales índices de Wall Street se mueven con alzas del 0,3% antes de la apertura de la bolsa neoyorquina. También ha habido reacción inmediata, y evaporada al poco tiempo, en las bolsas europeas. El Ibex 35 ha disminuido sus alzas para volver a cotizar con subidas del 0,5%.

SE ALEJA LA POSIBILIDAD DE QUE YELLEN APRIETE EL GATILLO

Los datos de empleo son claves para las decisiones de la Reserva Federal (Fed), que tiene el mandato dual de controlar la inflación en torno al 2% y perseguir el pleno empleo. En el primer caso, el documento mensual arroja pistas sobre la evolución de los salarios que son especialmente relevantes para generar presiones inflacionistas, tanto por los costes que soportan las empresas como por la demanda. En el segundo caso, la tasa de paro sube una décima, aunque el indicador sigue en niveles históricamente bajos. Además, las cifras del mercado laboral enfrían el optimismo sobre la economía norteamericana tras la revisión al alza esta semana de la estimación del crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) desde el 2,7% al 3% anualizado en el segundo trimestre

El banco central que preside Janet Yellen volverá a reunirse los días 19 y 20 de septiembre, aunque el mercado da por hecho que no habrá cambios ni en esta cita ni en la siguiente, de los días 31 de octubre y 1 de noviembre. Sin embargo, los inversores contemplan la opción de que haya una nueva escalada en los tipos, que subieron en junio hasta 1-1,25%, en el encuentro de los días 12 y 13 de diciembre. No obstante, el mercado ha disminuido la probabilidad asignada a una modificación al alza del ‘precio del dinero’ desde el 42% hasta el 37%, según el indicador FedWatch de CME. De esta forma, se consolida como la opción mayoritaria para esta referencia que termine el año en los niveles actuales.

Sin embargo, la elevada presencia de personas en edad de trabajar fuera del mercado laboral es lo que cuestiona el concepto de pleno empleo pese a la reducida tasa de paro -aunque haya aumentado una décima- y frena el impulso de la inflación a través de más consumo y presiones salariales, algo que tanto desconcierta a los bancos centrales, como reconoció ayer Luis María Linde, gobernador del Banco de España. De hecho, en Fráncfort el Banco Central Europeo (BCE) desempolva los manuales para encontrar respuestas a través de modelos como la curva de Phillips, que relaciona bajadas del desempleo con subidas de la inflación, o la tasa Nairu, que establece un nivel del paro bajo el cuál crece la remuneración de los asalariados.

Estados Unidos, como otras economías desarrolladas -algo que se observa con claridad en España-, tiene un porcentaje elevado de personas que no se contabilizan ni trabajando ni en búsqueda de empleo. En concreto, hay 94,785 millones, tras un incremento de casi 120.000 durante el último mes. Aunque también aumentó el número de activos, en 77.000 hasta un total de 160,57 millones, de las que 153,44 millones tienen empleo. La ratio de participación laboral se mantuvo aun así en el 62,9% -activos respecto al total de la población en edad de trabajar-, mientras que la tasa ocupada -personas trabajando frente a las que están en edad de hacerlo- descendió una décima hasta el 60,1%.

 Fuente: Bolsamania.com

Source: Economia