Son prácticamente idénticos a los billetes normales, están impresos en el mismo papel que los euros de verdad y tienen también casi todos sus sellos de seguridad: marcas de agua, relieves, hologramas y hasta número de serie.

Sin embargo, el billete puesto en circulación en Alemania carece de valor real. Se trata de una moneda dirigida a coleccionistas y turistas que pasen por el estado alemán de Schleswig-Holstein con el objetivo de que puedan llevarse un recuerdo único y especial de su experiencia. Así, cabe destacar que no es válido para transacciones, pero sí es de curso legal.

Tiene un valor de 2,50 euros ($1.875) y en una de sus caras aparece el buque alemán Gorch Fock II, un navío que se encuentra en la ciudad de Kiel que ya apareció entre 1961 y 1990 en los billetes de 10 marcos alemanes.

Fue el mismo Banco Central Europeo el que dio el permiso a Alemania para poner el circulación la primera edición de billetes de 0 euros. Sin embargo, tanto fue el éxito de la iniciativa turística que se vendieron los 5.000 ejemplares en menos de 24 horas.

Por esa misma razón, la ciudad de Kiel ya trabaja en una segunda edición, con más ejemplares que la anterior, para que todo aquel que lo desee pueda adquirir el famoso billete de 0 euros.

Este tipo de billetes turísticos existen desde 2015, cuando el francés Richard Faille los diseñó como souvenir y comenzó a imprimirlos para distintas ciudades de su país, como Marsella, siempre con el visto bueno del BCE. Desde entonces se han vendido unos 60 millones de ejemplares de billetes turísticos de cero euros, con unos 1.500 motivos distintos, como la Torre Eiffel, la Sagrada Familia de Barcelona, el Coliseo de Roma y la Puerta de Brandeburgo de Berlín.

Fuente: Emol.com


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